jueves, 14 de febrero de 2008

Diez Postales de San Valentín

  • 1999 - Nada memorable. Estaba ligeramente estusiasmado con la primera chica que me gustó de verdad: Adriana, botas, cabello anaranjado, fan de los Héroes del Silencio, promotora de Marilyn Manson, lectora de Herman Hesse, oscilando entre lo esotérico y lo apocalíptico, con problemas familiares y de adicción. Vaya, ¿dónde dejé su teléfono...? Ah, sí, es el de la casa de su esposo el que tengo.

  • 2000 - Estoy en el barandal del segundo piso de mi escuela, con Carolina. Ella me dice que durante el baile de la noche anterior (al que no asistí, desde luego) se besó con mi mejor amigo, y claro, se encendió la chispa del romance que me haría pedazos mi vida emocional ese último semestre de la preparatoria. Y, como para amargar un poco más el asunto, no era ni de chiste el primer beso, primera chispa, bla, bla, bla, sino el primero "público y oficial" y, por lo tanto, el momento de sincerarse, vaya. Yo, sin mirarla a los ojos, comienzo a desmoronarme.

  • 2001 - Estoy en la Universidad. Ella de nuevo (dos veces con la misma piedra, vaya, vaya). No sé qué es lo más triste, si haberme conformado con las migajas ofrecidas o que en ese momento le tendiera el poema más espantosamente cursi que se ha escrito Sol de mi vida. Oh, Satán, ten piedad de mi larga miseria.

  • 2002 - Dos meses antes, Marielos y yo habíamos terminado (¿No les encanta decir "habíamos", casi se siente uno participativo en la desgracia). Estoy visitándola en su escuela, sentado en un triste macetero de cemento, leyendo el tercer poema más inútil que he escrito. Ciclos cerrándose, Sol de mi Vida y Soñé... la involuntaria trilogía del fracaso.

  • 2003 - Estoy sentado en una mesa en un restaurant de comida china. El arroz está frío. Tengo inverosimilmente puesta una camiseta roja ad oc la fecha. En aquellos días, Silvia bien valía algunos gramos de extroversión y de ridículo. Y sí alguien me hubiera dicho que no iba a dejar a su novio, por más aburrida de él que estuviera, me hubiera reído. Pero ese alguien debió mostrarme su colección de zapatos, las fotos de sus vacaciones en Mazatlán y algunos archivos de contabilidad, para que yo también me riera, claro, con mi risa amarga, la que asusta.

  • 2004 - Limbo. Un día era 13 de Febrero y el siguiente fue 15.

  • 2005 - Estoy sentado junto a otras personas en círculo, para intercambiar tarjetas. Pasé el fin de semana anterior haciendo una tarjera de foamy de un personaje de South Park para la persona que me había tocado. Entrego la mía, ante la mirada emocionada de quién la recibió y los más cercanos. Luego, mi turno de recibir. ¿Conocen el cartoncillo? Noelia, una de esas personas que podría tragarse la tierra y que la reacción general fuera encogerse de hombros, me regaló una tarjeta de un anaranjado espantoso, escrita con pluma bic, que decía, bueno... Aquí me auxiliaré de una metáfora que alguna vez le escuché a Carlos: "Si se te hubiera subido en los hombros a cagarte, te habría caído menos mierda" que con esa carta.

  • 2006 - Al menos en cuanto a tragedia humana, estoy al día con los avances tecnológicos. Resulta que ese 14 de febrero lo pasé escribiendo un texto para mi viejo space descontinuado. Era sobre una malintencionada e insignificante personilla que necesitó no sólo de conseguirse la foto de mi estereotipo de belleza, sino que además hizo su tarea para fabricarse una identidad interesante y (para mí) seductora. Fue un intento de venganza que mi nível de sorpresa, y (en ese momento ampliada) capacidad de asombro ante la degradación humana no permitieron germinar. Todo el lugar dedicado a la emoción estuvo ocupado por la sopresa y el asco. Demasiado ocupado, dígamos, para la rabia o el dolor.

  • 2007 - Comprendí lo que era sufrir por alguien. De verdad. No penas de adolescente, no fiascos, no desiluciones inspiradas en el exceso de confianza. Comprender y sufrir un imposible, la opresión en el pecho, como si el cuerpo no se dignara a respirar en este mundo inmundo. Comprendí el dolor de tal manera que las heridas anteriores palidecen...

  • 2008 - Estoy en la banca donde suelo estar en las clases libres. Alguien escribió en el fondo negro del edificio "Maldigo el vocablo amor con toda su porquería" con letras de cartulina doradas, rodeó la frase con corazones de colores, y ¿esos globos de verdad tienen la forma de penes? ¿De dónde los sacaron? El antitético acto del no-me-importa-San-Valentin-pero-le-dedico-horas-a-decir-que-no-me-importa de toda la vida, cómo me avergüenza estar en esa escuela ciertos día. Dios, termina pronto con nuestra miseria, manda lluvia de fuego. Tennos piedad.


Bueno, no es que yo odie el 14 de Febrero, pero, vamos, estadisticamente, ¿qué más puedo hacer?

domingo, 10 de febrero de 2008

Madame Hate's Mad Search For Love



She walks down empty streets,
rhythm of a song in her head
"When I find myself in times of trouble"
-she forgets the rest
She needs no one,
she needs no one

The rain beats down upon her
adding insult to her injury
"What I wouldn't give not to have to live
in this place I'm in"
There is no one,
there is no one

Assist Madame Hate on her mad search for love
She so desperately wants to find
Yet constantly chases away

Father Time has cast his ugly image
in her mirror again
"It used to be so easy to be satisfied"
she remembers when
She carried hope in her pocket next to love
Believed it wouldn't end
Nothing can explain how it disappeared
Yet in her still it lives

There is no one,
there is no one

Assist Madame Hate on her mad search for love
She so desperately wants to find
Yet constantly chases away

Reluctantly she accepts
her eyes have opened to another day
"As much as things change
they remain the same"

Out of the corner of her eye
she sees someone she thinks she once knew
It happens every now and then but it never is true

Assist Madame Hate on her mad search for love
She so desperately wants to find
Yet constantly chases away

miércoles, 6 de febrero de 2008

Qué maravilloso mundo, lleno de sincronías...

John: How many of those pills you taking?
House: I’m in pain.
John: Yeah. Aren’t we all?


Hoy veía Dr. House, después de pasar algunas horas hablando con una de sus fans más entusiastas, Pamela. Yo, seguidor de Lost, The Shield y (últimamente) Heroes, mis espectativas de series médicas se veían satisfechas con Grey's Anatomy, así que nunca le había tomado demasiado gusto a la serie. Aunque eso comienza a cambiar, pues el episodio que vi (01 x 09, geeks) realmente me dibujó aquello que contradecía mis críticas (falta de profundidad en los personajes y una repetitiva fórmula en la resolución de los misterios médicos).
Y, francamente, el diálogo final del doctor y su paciente (un trompetista que había renunciado a todo tratamiento, cuya recuperación sobrepasó todas las espectativas) me tocó intimamente. Sobre todo la melodía que apareció de fondo, interpretada por Louis Armstrong (cuya voz aguardentosa se parece mucho a la de la fan entusiasta, al menos mientras le dure su gripe).
Es curioso (no deja de sorprenderme) cómo aparecen estas sincronías de la nada. ¿Cuál sincronía? Pues... Pamela me encanta, a ella le encanta Dr. House; a mí me comienza a encantar la serie; Pamela es fan de Louis Armstrong y, momentáneamente espero, tienen el mismo tono de voz. Y una de sus canciones salió en el episodio donde recuperé la fe en la serie de House ¿Y qué más, qué más? Hoy Pamela dijo "Qué lindo es todo" y qué cómo se llama la canción de Armstrong? What a Wonderful World... :)



What a wonderful world
Louis Armstrong



I see trees of green red roses too
Veo árboles verdes y rosas rojas también
I see them bloom, for me and you
las veo florecer, para ti y para mi
and I think to myself, What a wonderful world.
y pienso, que mundo tan maravilloso

I see skies of blue and clouds of white,
Veo cielos azules y nubes blancas,
the bright blessed day, the dark sacred night,
La bendición de un día claro, la noche sagrada,
and I think to myself, what a wonderful world
y pienso, que mundo tan maravilloso

The colors of the rainbow, so pretty in the sky
los colores del arco iris, tan lindos en el cielo
are also on the faces of people going by
también están en los rostros de la gente que pasa
I see friends shaking hands, saying, "How do you do?"
veo amigos dándose la mano, diciendo “¿Cómo estás?
they're really saying, "I love you"
realmente están diciendo “Te amo”

I hear Babies cry,
Escucho a bebés llorar
I watch them grow
Los veo crecer ellos
They'll learn much more than I'll ever know,
aprenderán mucho más de lo que yo jamás sabré
And I think to myself what a wonderful world
Y pienso, que mundo tan maravilloso
Yes I think to myself, what a wonderful world.
Si pienso, que mundo tan maravilloso.